Como sociedad, cada vez apostamos por opciones y materiales más sostenibles. Y por esa misma razón, en los últimos años han aparecido muchas alternativas al plástico hechas de silicona. Sin embargo, muchas veces me preguntáis: ¿Qué es mejor, el plástico o la silicona?
Plástico vs silicona. ¿Qué es cada cosa?
Aunque puedan parecer materiales parecidos, lo cierto es que plástico y silicona son cosas diferentes, ya que las materias primas con las que han sido elaborados son diferentes.
Por un lado, el plástico es un derivado del petróleo. Se usa la palabra plástico como término genérico que engloba varios polímeros orgánicos, como el Polietileno, el Polipropileno, el Policloruro de vinilo (PVC) o el Polietileno tereftalato (PET), entre otros.
Hoy en día, el plástico se encuentra presente en prácticamente todos los aspectos de nuestra vida debido a su versatilidad, su resistencia y también a su bajo coste. Sin embargo, su impacto ambiental es significativo ya que, debido precisamente a su bajo coste, la mayoría de los productos fabricados en plástico están diseñados para ser usados una sola vez. Esto provoca un gran volumen de residuos de un material que presenta grandes desafíos en cuanto a su proceso de reciclaje.
Por otro lado, la silicona es un polímero inorgánico constituido principalmente por silicio, el segundo material más abundante de la corteza terrestre, y oxígeno. La silicona tiene unas características similares a las del plástico, pero su vida útil es más larga. Por ello, es un material ideal para productos reutilizables.
La silicona es inodora, incolora, inerte y estable a altas temperaturas, por lo que no emite químicos tóxicos contaminantes como sí pasa con el plástico cuando se calienta.
Diferencias entre plástico vs silicona: Usos
Una de las bases del Zero Waste es apostar por aquellos productos que puedan utilizarse por más tiempo (que sería la R de ‘’Reutilizar’’). Aquí es donde la silicona demuestra una gran ventaja frente al plástico.
El plástico se emplea en muchas ocasiones para utensilios de usar y tirar, como botellas, bolsas y envases, pero también tuberías y otros componentes de construcción. Especialmente los productos de plástico relacionados con la alimentación generan un gran volumen de residuos innecesarios.
En cambio, la silicona dura más y no se descompone, ni emite microplásticos al medio, por lo que optando por productos de silicona estaremos también eligiendo la opción más duradera y sostenible. Están hechos de silicona productos como: copas menstruales, bolsas de silicona reutilizables, moldes para hornear, papel de horno reutilizable, pajitas… Eso sí, asegúrate que en estos casos sea silicona de grado médico o silicona de grado alimenticio.
Comparación entre plástico y silicona: Producción y Fin de Vida Útil
Por un lado, la producción del plástico es altamente contaminante debido a la cantidad de gases de efecto invernadero que genera este proceso. Debemos tener en cuenta que para la fabricación de productos de plástico es necesaria la extracción de combustibles fósiles, lo que aumenta más la huella de carbono y las emisiones de CO2. Añadir también que, para mejorar las cualidades del plástico, muchas veces se emplean productos químicos que pueden resultar nocivos tanto para la salud humana como para los ecosistemas.
El plástico no es biodegradable, tarda años en degradarse, convirtiéndose en microplásticos que afectan muy negativamente a los ecosistemas. Además, cuando el plástico se expone a altas temperaturas o es incinerado, emana diversos gases que son tóxicos tanto para la humanidad como para el planeta.
Por otro lado, aunque la producción de silicona también requiere energía, su impacto en términos de emisiones de carbono son inferiores a las del plástico. En parte, porque su obtención no depende de la extracción de combustibles fósiles.
Los productos fabricados con silicona tienen una vida útil más larga, por lo que su durabilidad evitará que se rompan y tengamos que renovarlos comprando otros nuevos. De todos modos, cabe mencionar que, aunque la silicona tampoco es biodegradable y tarda años en degradarse, cuando lo hace, no se liberan sustancias dañinas a la naturaleza. Al tratarse de un material inerte, puede ser incinerado convirtiéndose nuevamente en elementos inorgánicos que no dañan el medio: silicio, dióxido de carbono y vapor de agua.
Ventajas de la silicona sobre el plástico
La silicona le ha ido ganando terreno al plástico: muchos productos tienen ahora su versión en silicona, una versión más sostenible y ecológica. A continuación, os dejo un resumen de las propiedades de la silicona frente al plástico.
La silicona es resistente tanto a altas como bajas temperaturas
Existen tanto moldes para hornear como bolsas de congelación de silicona y en ninguno de los casos el material se va a degradar, algo que sí puede pasar con según qué plásticos. Así, vemos que la silicona es más resiste que el plástico en estos casos.
La silicona destaca por su durabilidad
A diferencia del plástico, la silicona no se descompone en elementos más pequeños, por lo que su vida útil permitirá que la usemos durante años.
La silicona está libre de BPA y no es tóxica
El BPA, común en elementos de plástico, es un químico nocivo que se ha relacionado con problemas de salud cuando está en contacto con los alimentos que ingerimos.
Si optamos por un producto de silicona estaremos eligiendo una opción más saludable y segura para nuestra salud.
La silicona es fácil de limpiar y mantener
La silicona, a diferencia del plástico, no retiene olores ni sabores, por lo que es una gran alternativa para productos reutilizables. Generalmente, es apta para lavavajillas, así que supone un plus en comodidad a la hora de su limpieza.
La silicona es hipoalergénica
Por lo que se puede usar tanto para uso alimentario como médico. Por ejemplo, las copas menstruales están fabricadas con silicona de grado médico. En este artículo podrás consultar mi experiencia con la copa menstrual.
En resumen, la silicona es una alternativa muy atractiva al plástico, ya sea por su durabilidad o sus propiedades. Aunque es cierto que su reciclaje todavía presenta desafíos, su capacidad para reducir plásticos desechables la hacen una perfecta alternativa para aquellos que buscamos reducir nuestra generación de basura diaria.